lunes, 22 de julio de 2013

Si la educación básica resuelve los problemas de fondo, la educación avanzada permite generar las bases de un alto desarrollo sostenido

lunes 22 de julio de 2013 (exraido del Diario El Universo de Venezuela)

Si la educación es el motor del desarrollo, la ciencia y la tecnología son las ruedas del progreso. Si bien es necesario brindar una educación básica para elevar el nivel educativo general de la población, también es necesario favorecer un continuo progreso científico y tecnológico. Si la educación básica resuelve los problemas de fondo y genera oportunidades para todos, la educación avanzada permite generar las bases de un alto desarrollo sostenido. El estudio de la ciencia debe comenzar con las niñas y los niños más pequeños, para que vean la belleza de las aplicaciones tecnológicas y se enamoren de las grandes posibilidades del futuro.

Las nuevas tecnologías obligan al cambio
Normalmente se suelen identificar tres grandes revoluciones históricas en la educación. La primera se produjo cuando se inventó la escritura, las sociedades primitivas comenzaron a diferenciar los trabajos de los adultos, la educación de los jóvenes pasó de los padres a los maestros y de la casa a la escuela. La segunda revolución educativa se produjo con la introducción de la imprenta y la masificación de los libros. La tercera revolución está ocurriendo actualmente gracias al acelerado desarrollo de la informática y las comunicaciones.

Las computadoras, las "tabletas" y los teléfonos inteligentes conectados a Internet representan los nuevos instrumentos educativos y tienen la capacidad para alcanzar una mayor cobertura que la lograda por los libros impresos.

Los libros escolares están comenzando a ser sustituidos por información digital en computadoras e Internet que es más actualizada, barata e interactiva. Así comenzaron a aparecer enciclopedias gratis en Internet, como Wikipedia, con ventajas adicionales como materiales didácticos audiovisuales que se actualizan continuamente.

Computadoras, tabletas y teléfonos inteligentes conectados a Internet son las herramientas educativas del futuro. Su impacto está transformando la manera cómo se enseña y cómo se aprende. Los resultados se ven desde la educación más básica hasta los niveles más avanzados.

Ahora los niños pueden aprender el alfabeto, números, animales y hasta música con computadoras. Luego pueden aprender arte, geografía, matemática, biología, química y física con otros programas. También pueden aprender idiomas y utilizar juegos interactivos que ayudan a pensar, desarrollar escenarios e interactuar con otros niños.

Poco a poco los jóvenes se van acostumbrando al mundo de la ciencia y la tecnología. Esta debe ser una prioridad para Venezuela si no quiere quedarse atrás como un país subdesarrollado.



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